El lugar público por excelencia de Torreparedones es el Foro. La plaza en torno a la que se articulan algunos de los edificios más relevantes de la ciudad fue descubierta en las excavaciones llevadas a cabo entre los años 2009 y 2010. Con unas dimensiones de algo más de 500 metros cuadrados, es de forma cuadrangular y destaca su pavimento a base de grandes losas de caliza micrítica de color gris, muy resistentes y similares a las que estaban colocadas en el Foro de la Colonia Patricia Corduba. En algunos de sus extremos presenta un canalillo perimetral que servía para evacuar el agua de lluvia hacia la cloaca que hay bajo el kardo.
La primera pieza de relevancia encontrada en esta zona del yacimiento fue el retrato en mármol blanco del emperador Claudio divinizado. A ello habría que añadir otro hallazgo relevante: una inscripción de litterae aureae (en su momento grandes letras doradas de bronce) que recuerda la acción evergética de Marco Junio Marcelo sufragando la costosa pavimentación de su propio pecunio.
Hoy por hoy, el foro de la ciudad romana de Torreparedones es el sector más monumental y vistoso por su estado de conservación. Esta gran plaza pública sería el centro neurálgico de la ciudad y por ello a su alrededor, además de los pórticos y la schola augustales (bancada de piedra reservada a los miembros de este cuerpo colegial) se encuentran notables edificios públicos como el templo, la basílica civil, la edícula de la Concordia y la curia.
El primero, aunque muy arrasado, responde al modelo de templa rostrata con una plataforma o tribuna destinada a oradores a la que se accedía por dos escalinatas laterales. Su planta era rectangular, con unas dimensiones de 15 metros de longitud por 9,40 metros de anchura que englobarían la cella, también rectangular. Su estructura era la de un templo periptero sine postico, con fachada tetrástila probablemente systila con fustes de 3 pies de diámetro. En la parte inferior del podium, arrancando desde la plaza forense aparecen tres grandes escalones que llevaban directamente hasta el muro donde estarían colocadas, muy probablemente, las placas de bronce con las leyes del municipio.
El flanco Oeste del Foro esta ocupado por la gran basílica civil donde se llevaban a cabo transacciones comerciales de importancia pero, sobre todo, se atendían las cuestiones judiciales de la ciudad. También servía como lugar de reunión para tratar diversos asuntos, protegidos de las inclemencias del tiempo. Es de planta rectangular con una superficie de unos 350 m2 dispuesta con el lado mayor en sentido norte-sur, de modo que cerraba la plaza por el lado oriental, quedando justo enfrente del templo. El pavimento, posiblemente de mármol, no se ha conservado pero si los 20 pilares que sustentaban las 20 columnas de la perístasis (8 x 4) que rodeaba la gran nave central disponía como mínimo de tres puertas de acceso desde la plaza del foro, una central más ancha y otras dos laterales. Tenía, como suele ser habitual en este tipo de construcciones, dos plantas de altura, la primera de orden jónico y la segunda con capiteles corintios.
En el recorrido por el Foro, junto a la basílica, destaca el pórtico Norte, donde se han colocado unas reproducciones de las esculturas encontradas in situ, entre ellas, la magnífica thoracata que se exhibe en el Museo Histórico de Baena. A continuación y antes de acceder a la escalera que conducía a la parte septentrional de la ciudad, se encuentra una pequeña edícula dedicada con toda probabilidad a la diosa Concordia, en cuyo interior se hallaron una piña de piedra perteneciente a una cornucopia, un braserillo ritual y un soporte pétreo donde es posible que se situara un estandarte relacionado con los primeros legionarios romanos que llegaron a la ciudad.
La visita a la Curia completará el recorrido por el Foro de Torreparedones, un espacio que respondía en todo al notable desarrollo urbanístico que vivió la ciudad durante el siglo I de nuestra Era y que alcanzaría su momento culminante en época de Tiberio, cuando se pavimentó con grandes losas la plaza forense y se revistieron de mármol los edificios que en ella se encuentran.
Imagen tomada desde el pórtico Norte en el Foro de Torreparedones.
Reproducción de retrato de Claudio; al fondo, la basílica civil de la ciudad.
Aunque originariamente se trataba tan sólo de un espacio abierto donde se reunía la asamblea del pueblo, con el tiempo acabaría convirtiéndose en el centro comercial, religioso, político y judicial de las ciudades romanas; un lugar de memorias “sagradas” donde se ubicaban los principales edificios de uso público y las esculturas de los distintos miembros de la familia imperial o de próceres locales a los que se les tributaba homenaje. El foro era igualmente el lugar elegido para acoger diferentes inscripciones relativas a los textos jurídicos que regían la vida de la ciudad o sus relaciones con Roma u otras ciudades. También podría considerarse al Foro como un espacio de representación en el que se encontrarían pedestales dedicados y conjuntos escultóricos como los que se exhiben en el Museo Histórico de Baena.
Para una mejor comprensión de la funcionalidad representativa de los Foros y situar en su lugar de origen muchas de las esculturas expuestas en el Museo Histórico de Baena, puede reproducir el vídeo superior donde se ha recreado este singular espacio de Torreparedones.